POSTURA

   La mayoría de las personas al leer, escribir a máquina o planchar adoptan posturas perjudiciales para su aparato locomotor en general y para su espalda en particular. Se suele doblar la espalda sólo por sus dos curvaturas fisiológicas (cifosis dorsal y lordosis lumbar), lo cual desemboca en numerosas ocasiones en un progresivo deterioro de los discos vertebrales (artrosis, hernias discal, etc. La mejor postura es la que crea menos tensiones en músculos, ligamentos, tendones y articulaciones.

   Para estar de pie se debe poner recta la espalda, alternar el peso corporal sobre las piernas y procurar descansar una extremidad en un punto algo más elevado. Toda desviación hacia delante o atrás de la columna mantenida durante bastante tiempo provoca contracturas musculares; forzar la curvaturas fisiológicas lumbar o tener los hombros y caja torácica caídos, es incorrecto. 

   Si de sentarse se trata,hay que procurar hacerlo en una silla recta, más bien dura y no muy alta, con la espalda y nunca erguidas, apoyando los muslos sobre el asiento y no flexionando las piernas más de 90 º. Los asientos de automóviles obligan algunas veces a no descansar la espalda y la cabeza, lo que provoca, entre otras contracturas cervicales. 
   A lo largo del día, ya sea en momentos de ocio o de trabajo, el cuerpo adopta distintas posturas, algunas de las cuales son perjudiciales para el organismo. El aparato locomotor y, fundamentalmente, la espalda son las zonas más afectadas por una mala postura.