OTROS TIPOS DE CONTAMINACIÓN

   Hay otros tipos de contaminación que afectan al hombre: la contaminación de las aguas y de la tierra y las radiaciones. La afectación de la salud por estos tipos de contaminaciones es, en algunas ocasiones, directas, pero la mayoría de las veces lo es a través de vegetales y/o animales contaminados.

Contaminación de las aguas continentales

   El agua, sustancia elemental para la vida, es el recurso natural más necesario y uno de los más contaminados. Las reservas de agua dulce del planeta se calcula que rondan los 24 millones de km 3 y el consumo diario en ciertas partes del mundo oscila entre 500 y 600 litros por habitante y día.

   Las ciudades, las industrias y las aguas procedentes de la agricultura son las principales fuentes de la degradación de del agua, la cual, en ese estado, pueden transmitir enfermedades infecciosas y parasitarias. Además, un exceso de ciertas sustancias, como el flúor o los nitratos, dará lugar a enfermedades como fluorosis o la metahemoglobinemia, respectivamente. 

   Contaminación marina

   El uso del mar como vertedero degrada este medio hasta casos, incluso, mortales.

   En 1956, en Minamata (Japón) se describió una intoxicación crónica por mercurio contenido en los peces consumidos por la población. Al fina, esta enfermedad afectó a 700 personas con un 35 % de mortalidad. La presencia de sustancias contaminantes en las cadenas de alimentación ha llevado a que algunas especies marinas sobrepasen los limites de mercurio admitidos por la OMS: así, en el Mediterráneo, un pez espada puede tener hasta 2,96 mg de mercurio por kg, un rape 2,61 y un langostino 1,04. Lo mismo podría decirse de otras sustancias.

  Hay que advertir del peligro de bañarse en ciertas playas donde la contaminación química y bacteriana del agua sea mayor de lo admisible, pues las otitis, conjuntivitis, micosis, etc. serían frecuentes.

   No sólo la contaminación química se (localiza) en peces y moluscos, sino también la bacterianas que provocan brotes de salmonellosis, cólera, etc. El cólera se transmite habitualmente por el consumo de aguas, pero también los moluscos procedentes de aguas coléricas lo producen (el caso de Italia en 1973). No se deben consumir mejillones que no hayan pasado por el control sanitario o por las depuradoras de los criaderos.