La sexualidad de los cónyuges pueden estar alterada por el miedo al embarazo no buscado. Para aliviar esta preocupación e incluso los problemas que pueda acarrear, existe la posibilidad de echar mano de los métodos anticonceptivos. Si la pareja decide utilizarlos es imprescindible una visita al ginecólogo, a no ser que se usen preservativos, los cuales tienen poca fiabilidad (15 embarazos por cada 100 mujeres cada año) además de poder producir dificultades para el orgasmo tanto en el hombre como en la mujer. La visita al médico debe realizarse para que éste aconseje el método más apropiado dadas las características de la mujer, valorando eficacia y efectos secundarios.
La contracepción hormonal puede ser de dos tipos: terapéutica combinada (estrógenos y gestágenos a la vez) y terapéutica secuencial (primero estrógenos solos y luego éstos más gestágenos). Aparte existen otros medios mucho más usados y con un índice de fallos algo superior. La terapéutica combinada tiene eficacia de 99, 8 % y la secuencial del 99,5 % (García, Goldzieher y Massey). Dada sus alta eficacia su uso está muy extendido y es el más aconsejable para una mujer joven y sana. Los problemas que ocasionan o pueden ocasionar son muy variados pero, si se sigue un control médico cada 6 meses o un año, éstos se reducen considerablemente. Como norma general una mujer mayor de 40 años o las personas que tengan problemas de coagulación, enfermedades hepáticas, hipertensión arterial, diabetes, obesidad, etc., no deben utilizar, o hacerlo bajo estricto control médico.
Otro de los métodos eficaces que se usan es el dispositivo intrauterino (DIU), el cual tiene una eficacia comprendida, según varios autores, entre el 90 y el 97 %, aunque depende de las características del dispositivo, del tamaño de éste y de la mujer. Las tasas acumulativas, al quinto año llevar un DIU, elevan los fallos por encima de 10 por cada 100 mujeres cada año. Puede provocar problemas de infección y de perforación uterina, aun cuando esto último es muy raro, dolor, hemorragias y embarazos ectópicos (embarazo producido fuera del lugar normal). el mecanismo de actuación del DIU no se conoce con exactitud, pero parece ser que impide la fecundación y la normal implantación del huevo embrionario en la pared uterina.
Tanto las cápsulas como los diafragmas se colocan apoyados sobre el cuello uterino para impedir el paso de espermatozoides y su eficacia oscila entre el 71 % y el 95 %, es decir, de 29 a 5 mujeres que se quedan embarazadas cada año sobre las 100 mujeres que se estudian. Los espermicidas inactivan a los espermatozoides pero su eficacia es muy relativa.
El coitus interruptus arroja una incidencia de embarazos del 16 % anual. Su fallo principal estriba en que, momentos antes de la eyaculación, el pene libera unas gotas provenientes de la secreción de las glándulas de Cowper que, en numerosas ocasiones, arrastran una pequeña cantidad de espermatozoides. En cualquier caso este pequeño número de espermatozoides o el depósito de semen en los genitales externos, pueden conducir al embarazo.
El método del ritmo, inventado por Ogino, fracasa según las estadísticas entre el 7 y el 38 %. El método de la temperatura basal limita la posibilidad de mantener relaciones sexuales sólo a 8 días cada mes, con las consecuencias e incomodidades que ello se pueden derivar.
Por último, el método más seguro, pero por ahora prácticamente irreversible salvo casos excepcionales, es la esterilización femenina, Hay que pensar que es definitivo y por eso es conveniente esperar hasta estar seguros de no desear descendencia. La vasectomía o esterilización masculina en principio también es permanente, aunque con ciertas técnicas quirúrgicas pueden ser reversible.
La sexualidad debe asumirse como algo bello, natural y necesario para la pareja. El placer inherente a la sexualidad es natural, pero no debe ser el único fin que se busque en una relaciones estables.
Al igual que en todos los aspectos de la vida, en la sexualidad de una pareja suelen surgir problemas que sólo se solucionarán mediante la comprensión y el apoyo mutuo.
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