Un niño con forma de perro
Los últimos capítulos describen e ilustran la crianza del perro, las exposiciones caninas y, quizás lo más importante, los primeros auxilios. Deberíamos contemplar a nuestras mascotas de igual forma que vigilamos a los niños pequeños. Ambos son inquisitivos, si encuentran algo interesante saborearlo inmediatamente, si algo sugestivo atrae su atención enseguida se acercarán a examinarlo.
Se produce accidentes, pero con una buenas nociones de primeros auxilios seremos capaces de proporcionar una asistencia inmediata que puede resultar vital. Así, deberíamos saber administrar un masaje cardíaco y practicar la respiración artificial "boca a hocico", o la forma de detener una hemorragia y vendar heridas leves. En el caso de accidentes de tráfico, deberíamos estar familiarizados con las técnicas de evacuación de un animal herido y su traslado al cetro de atención más cercano.
Se produce accidentes, pero con una buenas nociones de primeros auxilios seremos capaces de proporcionar una asistencia inmediata que puede resultar vital. Así, deberíamos saber administrar un masaje cardíaco y practicar la respiración artificial "boca a hocico", o la forma de detener una hemorragia y vendar heridas leves. En el caso de accidentes de tráfico, deberíamos estar familiarizados con las técnicas de evacuación de un animal herido y su traslado al cetro de atención más cercano.
El último nexo con el mundo natural
Resulta curioso que, contando casi todas las culturas con animales domésticos, el perro sea el favorito a nivel mundial. A medida que pasamos de una cultura agraria a otra urbana, el perro es en muchos casos uno de nuestros últimos lazos de unión con el mundo natural. Nos complace cuidar y atender nuestros jardines y a nuestras mascotas. Esta es una satisfacción primitiva, pero el hecho de que nos resulte vital constituye un buen presagio para el futuro de la Naturaleza que nos rodea.
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