Riñón y vejiga
Para afecciones de riñón y vejiga, tradicionalmente, se ha tomado infusiones de dorarilla, cascabelera (arenaria), rompepiedra (riñonera), malva, ratonera, mellorina (miluriña, pampina, palomina), zarzaparrilla, bolsa de pastor, treintanudos, verdolaga, barba de millo, estrella de mar, rama y raíz de perejil, alpiste y de mastuerzo (cervellina). El perejil y el mastuerzo pueden provocar abortos, por lo que no las deben tomar mujeres embarazadas.
Para irritación ha sido muy eficaz la arenaria (cascabelera) igual que la tostonera, también en infusiones. Para eliminar orina, la bolsa de pastor, barba de millo y treintanudos, son, asimismo, muy buenas.
Para eliminar piedras, la mejor de todas es la que lleva el mismo nombre de "rompepiedra", tomando varios vasos al día, preferentemente fría. Es la planta más "milagrosa" que existe para destruir el cálculo; pues posiblemente no haya otro medicamento más eficaz.
Si existen infección, las mejores plantas son la mellorina (miluriña, pampina, palomina), la zarzaparrilla, la doradilla, la malva y el perejil, independientemente de que se tomen, aguas de cualquiera otra, de las anteriores expuestas.
Para piedras en el riñón: tuno silvestre, de esos tunos rojos que hay en las costas, con picos muy grandes). Se saca el fruto, se pone en un plato con azúcar por encima y se dejan al sereno (rocío) toda la noche. Se comen como desayuno, sin otra cosa.
Un remedio, para piedra en el riñón, se coge un huevo, se mete en un vaso se cubre con vinagre, se pone al sereno por la noche y al día siguiente, temprano, se toma esta mezcla. El huevo ya no tiene cáscara, ablandada con el vinagre. Es muy eficaz. Para afección de vejiga, también solían poner "manteca de cochino encima de la vejiga".
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