¿En qué consiste un perro?
Un ejemplo claro de la conformación clásica del perro es la estructura de la raza más popular del mundo, el pastor alemán. Este perro posee un pelaje espeso que le sirve como excelente aislante contra el frío, carece de soldadura entre las patas delanteras y los omóplatos, lo que le permite correr sin tregua apoyándose en estos "amartiguadores", un hocico largo con dientes especializados en rasgar y triturar y poderosos músculos que no se cansan fácilmente. Este es el diseño básico del lobo y de su pariente, el perro esquimal.
A través de la crianza selectiva, los seres humanos hemos mejorado algunos aspectos de estos prototipo, pero también hemos creado razas con menores expectativas de vida y muchos problemas médicos.
La conformación básica del perro: El perro típico tiene una estructura redondeada y musculosa, diseñada para resistir, de proporciones eqilibradas y con capacidad para emplear todos sus sentidos máximo redimiento.
Cola recta para señalizar, cabeza grande, con amplia capacidad cerebral, hocico largo con dientes bien distribuidos, pelaje corto y denso que actúa como aislante, patas traseras con potente músculos para saltar, pecho ancho, con gran capacidad pulmonar, patas firmes y robustas, con dedos espaciados.
A través de la crianza selectiva, los seres humanos hemos mejorado algunos aspectos de estos prototipo, pero también hemos creado razas con menores expectativas de vida y muchos problemas médicos.
La conformación básica del perro: El perro típico tiene una estructura redondeada y musculosa, diseñada para resistir, de proporciones eqilibradas y con capacidad para emplear todos sus sentidos máximo redimiento.
Cola recta para señalizar, cabeza grande, con amplia capacidad cerebral, hocico largo con dientes bien distribuidos, pelaje corto y denso que actúa como aislante, patas traseras con potente músculos para saltar, pecho ancho, con gran capacidad pulmonar, patas firmes y robustas, con dedos espaciados.
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