CONDUCTAS INDESEABLES DEL PERRO

Cómo controlar conductas indeseables

   A veces el perro se deja llevar por sus sentimientos o simplemente por el deseo de hacer lo que le apetece. A menudo conduce a una excitación elevada y a la desobediencia.

   Es más probable que el perro que salta sobre su dueño, en esfuerzo por lamerle la cara, sea sumiso, y esté imitando su comportamiento de cachorro. Este perro también saltará para saludar a los visitantes, a quienes ubicará en una posición tan dominante como su dueño.

   Es más probable que la desobediencia se dé entre perros autosuficientes e independientes que en animales sumisos o tímidos. Un buen adiestramiento evita los malos hábitos, pero si se producen siempre se puede remediar con paciencia.

El perro excitable

   Saltos: Los perros a menudo saltan sobre sus dueños para saludarles. Desde su punto de vista esto es normal.

   Remedio

1. Para corregir esta conducta, decimos "no" tajantemente, a la vez que nos giramos y aludimos el contacto visual. No hay que montar un escándalo al perro.
2. Ordenamos al perro que se siente. Si ha sido bien adiestrado obedecerá inmediatamente.
3. Ahora podemos saludar al perro en nuestro términos. Debemos felicitarle por obedecernos. Pronto se dará cuenta de que no debe saltar sobre nosotros para saludarnos.

El perro desobediente

   Huir cuando se le llama: A veces nuestro perro puede negarse a acudir cuando le llamamos, especialmente si lo hacemos para volver a poner la correa. No debería asociar venir hacia nosotros con algo desagradable o una reprimenda. No obstante, si le perseguimos el perro puede pensar que se trata de un juego.

   Solución: Podemos utilizar uno de sus juegos favoritos para atraer la atención del perro, para a continuación jugar con él antes de volver o al juego con ser atado con una correa. Cuando venga hacia nosotros hay que ordenarle que se siente y felicitarle.

Equipo disciplinario

   Pulverizador, pistola de agua y alarma de sonidos agudos son útiles para acudir al animal. Los juguetes se pueden usar para atraer su atención o como recompensa. No se debe castigar al perro por una mala conducta.