REÚMA

Reúma

   Para remediar los dolores empleaban aguas hervidas de hierbas ratoneras, orobal, sándara (sádalo, toronjil), poleo, leña buena (leña santa, orijama), tomillo, salvia y jaramagos.

   Se utilizaba hojas de mol (incienso) puesta sobre la zona afectada y la cubrían con una venda o media. Los pastores se ponían miel y lana de oveja en la piel para que quedara en forma de venda.

   Se usaban cebo de pardela, calentito, que empleaban preferentemente por la noche, y evitaban coger frío.

   Otro remedio tradicional ha sido el alcohol con una rama de romero dentro y una poquita de sal. Lo conservaban, bien tapado para utilizarlo en el momento adecuado, frotando la piel.

   También se recurría a fomentos de agua caliente, y ésta, asimismo con vinagre y sal.