CONEXIÓN TELEFÓNICA

Conexión telefónica

   La velocidad de conexión es un factor muy importante y que todavía preocupa a muchos usuarios de Internet que sufren conexiones lentas.

   como veremos ahora, existen varias formas de conectar a la Red con nuestro ordenador y cada una de ellas se caracteriza por disfrutar de una velocidad determinada. Esta velocidades se mide en Kbps, Kilobytes por segundo que se pueden llegar a transmitir. Una conexión lenta, por ejemplo 33 Kbps, obtendrá los datos de Internet (por ejemplo, las imágenes de una Web) mucho más despacio, por lo que lo más seguro es que perdamos mucho tiempo delante del ordenador simplemente esperando.

   En condiciones normales, la comunicación entre los modos de Internet es muy rápida, por lo que verdaderamente notamos es esa descarga de datos en nuestra computadora. Si además de páginas Web, descargamos datos más pesados, como audio o vídeos, la velocidad de la conexión es determinante.

   Aunque depende del tipo de módem, la conexión convencional a través de la línea telefónica suele ser de unos 56 Kbps. Actualmente, las conexiones a Internet por vía telefónica resultan demasiado lentas, sobre todo teniendo en cuenta el tipo de contenido multimedia que habitualmente encontremos hoy día en casi cualquier página Web. Por ejemplo, descargar un trailer de una película de unos minutos  de duración puede llevar horas y, por supuesto, mejor ni siquiera intente disfrutar de contenidos en streaming, porque lo más seguro es que si, con suerte y mucha paciencia, consigue escuchar o ver algo, será con cortes constantes y "saltos". Por todo ello, en estos momentos este tipo de conexiones suelen ser o gratuitas o muy baratas. si son gratuitas, no deberemos pagar por tener el servicio de conexión a Internet, sino solamente las llamadas realizadas. Otra opción consiste en utilizar una "tarifa plan", de tal forma que no pagamos las llamadas sino una determinada cuota por el servicio de conexión. Actualmente, estas conexiones de tarifa plana tienen un coste de entre 7 y 15 euros, lo cual resulta carísimo teniendo en cuenta que por un poco más ya se comercializan conexiones ADSL que son mucho más rápidas.