Anemia y decaimiento
Agua hervida de cola de caballo; se emplea como estimulante para abrir el apetito.
Hacían raleras de gofio y vino, a lo que le añadían un huevo crudo, que batían y revolvía conjuntamente para tomarlo una vez al día. También solía añadir azúcar.
A un huevo batido con azúcar lo mezclaban con cerveza y lo bebían normalmente como desayuno. igual que la receta con vino, pero sólo una de las dos. Era frecuente que los hombres, especialmente, cascaran un huevo dentro de un vaso de vino, o de cerveza, y lo tragaran entero, sin azúcar. Era muy apetecido.
El caldo de gallina se empleaba como un buen reconstituyente pero, salvo excepciones, se le daba a alguien enfermo y muy especialmente a una mujer que acababa de dar a luz. "caldo de parida".
El jugo de jaramagos, no más de un vaso mediano al día, se emplea como uno de los mejores reconstituyentes, igual que la cerrajas y los berros, que también se empleaban en potaje.
El valor de las lentejas ha sido bien conocido para combatir la anemia y decaimiento. Asimismo se empleaba el vino de membrillo como un reconstituyente.
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