11/9/11

Una Mezcla de granos

Una mezcla de granos especiales
Vamos a presentar una mezcla de granos (especiales). No une ración comercializada y al menos que yo sepa. (y ésto va para los pocos que pudieran pensarlo) no hay intereses económicos de por medio. Únicamente se trata de divulgar unos pocos de conocimientos de (DIETETICA COLOMBÓFILA).
La ración. Sin divagaciones, la ración se confecciona simplemente mezclando; el 5% de Girasol, el 25% de Guisantes, el 35% de maíz y el 35% de cebada. Añadiré que los porcentajes se refieren al peso.
LA ELECCIÓN DEL GRANO.
A) Desde el punto de vista general. Estos granos que componen la ración, debe ser: Maduros, enteros, sanos, y limpios. Por granos maduros debe entenderse aquél que, obviamente, no es ni nuevo ni viejo. Cada grano un tiempo para alcanzar la maduración. Por granos entero debe entenderse que no le falta ninguna fracción, insistiendo particularmente en la integridad necesaria de la zona que comprende al germen y a la cáscara, con la excepción de la cebada en la que es imperativo el (despuntado) para facilitar su ingestión, pero no afecta a su valor alimenticio. Por grano sano entendemos, la total ausencia de parásitos (insectos). De la limpieza hablaremos en otro apartado. Todos los granos (germinarán) en un porcentaje elevado.
B) Desde un punto de vista particular. La variedad de maíz más aconsejable es el tamaño pequeño, de un amarillo naranja subido y bastante resistente a los parásitos. Entre los guisantes recomendamos la variedad (NAPLE PEAS). o guisante aspeado. En cuanto al girasol diré que en realidad, es mejor utilizar el (CARDI) o pequeño girasol blanco. Finalmente la cebada, debe ser muy rubia y rolliza.
LA LIMPIEZA
Como es de suponer lo mejor es comprar los granos limpios y a una empresa especializada en el suministro de semillas selectas preparadas para palomas, aunque el precio sea, lógicamente, algo más elevado. De todas formas siempre tenemos a nuestra disposición la alternativa de limpiarlos nosotros mismos. Normalmente suele bastar con, echarlos en un recipiente con agua y removerlos unos minutos, luego se sacan enseguida se esparcen sobre una superficie limpia, en donde permanecerá varios días, volteándolos de tarde en tarde, hasta que estén perfectamente secos.
ALMACENAMIENTO.
Cuando existe una empresa capaz de suministrar regularmente y durante todo el año, semillas seleccionadas a un precio razonable, entonces lo mejor es dejarle esta tarea a ella.
Si por una u otra razón, asumimos dicho trabajo, lo más conveniente es almacenar cada tipo de grano por separados en un recipiente, digamos con capacidad hasta 50 kgs. cuyas paredes y fondo estén totalmente perforadas, para que la ventilación sea la mayor posible. Todas las semanas se (trasvasa) el grano a otro recipiente similar, para que todos y cada uno de los granos, estén siempre bien airados. Los recipientes con el grano se guarda en un local bien iluminado indirectamente y bien ventilado.
LA COMPOSICIÓN DE LOS GRANOS.
Son duda todos sabemos que todos los granos se componen de: Proteínas, carbohidratos, grasas, fibras, minerales, agua y vitaminas.
Desde el punto de vista de la composición cualitativa, es necesario decir que, los diferentes tipos de granos se diferencian entre sí por el tipo de proteínas, carbohidratos, grasas, minerales y vitaminas que llevan incorporadas, y sólo una mezcla acertada de ellos puede evitar las carencias alimenticias.
Desde el punto de vista de la composición cuantitativa, existen igualmente diferencias entre las distintas especies de semillas y, concretamente entre 4 granos de nuestra mezcla, esta son las siguiente.

GRANO % PROTEÍNA % CARBOHIDRATOS N % GRASA %MINERALES %FIBRA %AGUA
_____________________________________________________________________________________
CEBADA 8,6 67,9 1,5 2,6 4,5 14,9
______________________________________________________________________________________
MAÍZ 9,9 69,2 4,4 1,3 2,2 13,0
_____________________________________________________________________________________
MAPLE 22,5 53,7 1,6 2,8 5,4 14,0
________________________________________________________________________________________
CARDI 14,2 14,5 32,3 3,4 28,1 7,5


COMPOSICIÓN DE LA RACIÓN
Calculemos primero los porcentajes relativos medios de los diversos componentes del grano que suministra nuestra mezcla:
____________________________________________________________________________________
PROTEÍNA CARBOHIDRATOS GRASA
_______________________________________________________________________________________
CEBADA 35% x 8,6=3,010 35% x 67,9=23,765 35%x1,5=0,525
MAÍZ 35% x 9,9=3,465 35% x 69,2=24,220 35%x4,4=1,540
MAPLE 25% x 22,5=5,625 25% x 53,7=13,425 25%x1,6=0,400
CARDI 5% x 14,2=0,710 5% x 14,5=0,725 5%x32,3= 1,615
12,810% 62,135% 4,080%

__________________________________________________________________________
MINERALES FIBRA AGUA
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CEBADA 35% x 2,6=0,910 35%x4,5=1,575 35%x14,9=5,215
MAÍZ 35% x 1,3 =0,455 35%x2,2=0,770 35%x13,0=4,550
MAPLE 25% x 2,8=0,700 25%x5,4=1,350 25%x14,o=3,500
CARDI 5% x 3,4 = 0,170 5%x28,1=1,402 5%x7,5=0,375

2,235% 5,097% 13,640%
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Redondeado. 13% de proteínas, 62% de carbohidratos, 4% de grasa, 2% de minerales, 5% de fibra y 14% de agua.
Veamos a continuación, aunque sólo sea superficialmente el motivo de estos porcentajes:
La proteína de una mezcla de granos puede variar bastante, pero sin embargo, lo más aconsejable es que sea del 13% Dentro del huevo, el organismo de la paloma se nutre con un porcentaje muy elevado de proteína, procedente de la yema y de la clara. Durante la primera semana de vida el porcentaje de proteína también es muy alto, porque el pichón sólo es alimentado con papilla que segregan del buche sus padres. Después de ésta primera semana el pichón empieza a recibir granos, primero leguminosas, muy ricos en proteínas, pero poco a poco van siendo sustituidos por cereales hasta que, éstas alcanzan el protagonismo en la dieta de la paloma.
La naturaleza ha dispuesto que al principio la alimentación sea muy proteica para poder crecer muy rápidamente , pero según se va alcanzando el tamaño adecuado, entonces se va volviendo cada vez menos proteica, pero sin perder cierto (nivel), digamos el 13% de (mantenimiento).
Con la grasa ocurre lo mismo, al principio se requiere mucha (energía concentrada) para poder crecer en poco tiempo, y así el porcentaje de grasa es muy elevado en el huevo y en la papilla, pero poco a poco va disminuyendo hasta colocarse al final, en torne al 4%. Al carbohidratos les sucede todo lo contrarío, nada en el huevo, nada en la papilla y empiezan a aparecer con los granos, alcanzan el máximo, el 62%, cuando los cereales logran el protagonismo.
El 5% de fibra que suministra ésta ración, es muy parecida al de la cebada o el guisante, los cuales constituyen el 35 + 25 = 60% del total de la ración.
El maíz y el girasol en esa proporción mutua de 7 a 1, no varía éste nivel de fibra por complementarse entre si de forma perfecta. El intestino, es por decirlo así, un segundo (corazón) ya que está muy irrigado y posee movimientos de contracción y dilatación. Para que este corazón secundario funcione adecuadamente, es necesario que la dieta lleve un buen porcentaje de fibra. El porcentaje que agua de nuestra mezcla no podía ser otro que el que lleva cualquier cereal, es decir, aproximadamente el 14%.
Hablemos ahora un poco de la (calidad) de éstos componentes del grano que suministra en esos porcentajes nuestra ración.
1º. La proteína (resultante) es de gran calidad, dicho de otro modo, es la que (necesita) la paloma. Si miramos el proceso de cálculo de la proteína de la mezcla, nos daremos cuenta de que la mayor parte de ella (44%) lo aporta el guisante y el resto (27%, 23% y 5,5%) procede de la cebada, el maíz y el girasol respectivamente. Si sumamos el aporte proteico de la cebada y el maíz nos da = 27% + 23,5 = 50,5%; es decir, casi la mitad la aportan los cereales y casi la otra mitad los leguminosas, y esto es bueno, porque se sabe que se complementan maravillosamente.
2º. Los carbohidratos, en forma de almidón en los granos, los aportan fundamentalmente el maíz (39%) y la cebada (38%), ya que en conjunto suministran el 39 + 38 = 77% del total de la mezcla. Es bueno que los almidones del maíz sean (sustituidos) en gran parte por los de otros granos, ya que generan mucha grasa, seguramente por un mecanismo alérgico.
3º. La grasa de la mezcla la aportan principalmente el girasol (39,5%) y el maíz (37,7%) dando en conjunto el 39,5 +37,7% = 77,2% del total. Es del dominio popular la buena calidad del aceite de girasol y del maíz, y sólo añadiré que su calidad se debe a que lleva lo que verdaderamente (necesita) la paloma.
4º. Los minerales (sodio, potasio, cloro, hierro, etc.) que aporta la ración en conjunto es sólo, por así decirlo, una pequeña ayuda para la paloma, puesto que los suelos donde se cultiva(sistemáticamente) los granos, sólo son abonados parcialmente, y dejan bastante que desear bajo ésta óptica. De todas formas, los aficionados van comprendiendo la necesidad de complementar los granos con Sal marina integral, tierra arcillosa, conchas trituradas y el sílex para (moler) los granos, y esto, por supuesto, resuelve el problema.
5º. La fibra y el agua, son sólo celulosa y agua y su calidad es siempre la misma.
6º. La calidad vitaminica de ésta mezcla es satisfactoria. Una de los principales problemas en éste terreno es de asegurar el suministro de vitaminas A y del complejo B.
Los deficientes de éstas son perceptibles, al igual que su corrección con el aporte adecuado, en diversas formas, de dichas vitaminas. La deficiencias en vitaminas D no es tan fácil de percibir, ya que el raquitismo también puede deberse a la falta de minerales como calcio. Aunque se habla mucho de la deficiencia de la vitamina E, yo particularmente, nunca conocí que una paloma joven la sufriera. La esterilidad se puede deber a otras muchas causas, seguramente mucho más probables. Sea como sea, estos cuatro granos, cuando son de calidad, llevan éstas en cantidad suficientes y también otras, que aún sin ser indispensables son beneficiosas para la paloma.
LA PROPIEDAD DE LA RACIÓN.
Aparte de alimentar, nuestra ración por lo menos, dos propiedades especiales: una es la de ser (depurativa) y la otra de la (saciarse engordar).
Es indudable que el tipo de vida que les imponemos a nuestras mensajeras, con la atención de obtener de ellos ciertas prestaciones, es antinatural y conduce más pronto o más tarde según la (calidad) del aficionado, pero finalmente a la (intoxicación).
Algunos colombófilos advertidos, pretenden solventar este asunto con el empleo semanal de la verdura, ya que ésta les depura en cierto grado. Otros recurren al empleo de TES de diversas clases con cierta frecuencia. También los hay que emplean el viejo método de (dejarlas siempre con algo de hambre), o bien el ayuno periódico. etc.
Personalmente pienso que un sistema mejor que estos y otros que no he citado, es simplemente el de utilizar la (CEBADA), tanto como sea posible, y esto último lo digo particularmente para los que siempre exageran las cosas y traspasan avariciosamente los limites. La cebada es el depurativo más idóneo para la paloma, y ésta no es su única virtud.
Cambiando de tercio, aunque se utiliza el método de la (alimentación controlada), es decir, cuando uno es el que decide (que, cuanto y cuando) ha de comer cada paloma cada día, surge el grave problema de que seguramente dedico a la psicosis colectiva de hombre del grupo, las palomas comen alocadamente, sin fijarse en la cantidad ni en la calidad del grano comido; cosas que si hacen y de manera perfecta, cuando alimentación es libre; y esto conduce también ala intoxicación. Para evitar que coman demasiado se suele utilizar varios (sistemas), basados todos en (limitar) la cantidad de grano a comer. Particularmente creo bien (saciar sin engordar). Si cogemos (K kilos) de nuestra mezcla, la cual sólo lleva granos grandes, y esto lo digo porque muchos miran sin ver, y los echamos en un recipiente y marcamos la altura que alcanza; y si luego cogemos (X kilos) de cualquier otra mezcla, pero que lleven granos pequeños, y los echamos en el mismo recipiente, observamos que la altura alcanzada es (inferior) Esto quiere decir, ni más ni menos, que nuestra mezcla es poco (densa), y en consecuencia, a la vez que alimentamos y deja satisfecha a la paloma, impide la intoxicación por el exceso de comida.
Por otra parte, una paloma que se (llena) el buche con ésta mezcla, lo (vacía) en el momento justo para mostrar (un buen apetito) a las 24 horas y esto es importante, pues la paloma nunca debe mostrarse (indiferente) o (loca) por el grano a la hora de la comida.
El que los granos sean grandes no impiden que la molleja pueda (masticarlos) sin problemas; o sea, se trata de mezcla suficientemente aceptada en el aspecto de la (digeribilidad)
Finalmente, en cuanto a la apetitosidad de la ración, ha de acordar que todas las palomas rechazan sistemáticamente la cebada, cuando pueden elegir otros granos. Pero ésta sólo constituye un tercio aproximadamente del total, siendo los dos tercios restantes irreprochables bajo este aspecto, y quizás esta sea la rezón de que (en conjunto) nuestra mezcla pueda ser calificad de razonablemente apetitosa.
Conclusión: Los aficionados tenemos la obligación de adquirir, entre otros, unos conocimientos de dietética básica sobre colombofilia, pues, según han dicho y probado otros: (es, figurativamente, por la boca la nacen y mueren los cultivos de mensajeras).



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