24/9/11

Solamente reproductores

Solamente machos reproductores
El tema de "La reproducción de mensajeras" es muy complejo y, precisamente, éste hecho determina el bajo rendimiento que obtienen la mayoría de aficionados en este campo. Se hace,pues necesario divulgar las buenas ideas que, de vez en cuando, surge con la sana intención de mejorar las estadísticas. Demosles una oportunidad.
Para reproducir solamente con machos, y hacerlo bien, es conveniente empezar preparándoles un palomar adecuado. Como se trata de machos cautivos, lo mejor es construirles un pequeño aviario bajo las premisas mínimas siguientes: piso y pared norte de cemento; paredes sur, este, y oeste de barrotes, y techo de fibrocemento. En la pared norte se colocarán los criaderos, que deben ser muy espaciosos y tener el frente de barrotes.
A continuación hay que revolver cielo y tierra para adquirir en propiedad, por lo menos, dos machos que sean fuera de serie, tanto en lo referente al físico como comportamiento. Se tomará la precaución de que dichos machos no sean consanguíneos y, además, que sean de características semejantes. Estos machos han de durarnos unos cuantos años, así que no deben ser viejos.
Luego, cuando se acerque la época normal en las palomas para reproducir pediremos "prestada" alguna hembra buenas, sanas, y jóvenes. Bajo ningún concepto debemos adquirir nunca hembras en propiedad. Después de haberle criado a nuestros machos durante toda la temporada de crianza, devolvemos estas hembras a sus propietarios y ya nunca más volverá a entrar otra hembra extraña en nuestro palomar.
Al año siguiente, para volver a reproducir, aparearemos nuestros machos con pichonas que hemos criado nosotros mismos la temporada pasada, tomando desde la ahora la precaución de no aparear nunca padre con hija. Si sólo tenemos dos macho (A y B), las combinaciones posibles son dos: las hijas del macho B con el macho A; y viceversa las hijas del macho A con el macho B. Si tenemos más machos, entonces las combinaciones posibles aumentan considerablemente.
En la temporada siguiente, y en las sucesivas, las reproductoras se elegirán siempre entre las pichonas nacidas en nuestro palomar, de tal forma que siempre se renuevan anualmente.
Como es lógico, los pichones machos que vayan naciendo, así como las pichonas que no sean elegidas como reproductoras, e igualmente las reproductoras que han dejado de serlo, formarán la base del equipo de viajeros. Cuando alguno de los machos reproductores deje de sernos útil,se le sustituirá por otro que, evidentemente, satisfaga nuestra necesidades ya comentadas con anterioridad. Sin embargo, debemos evitar renovar los machos reproductores con demasiada frecuencias.
Para evitar el desgaste prematuro de los machos,se puede: ó construir otro aviario, semejante al descrito, y poblarlo con parejas "amas de crías", cuya única función será la de criarle los pichones a los razeadores; ó bien, espaciar la crianza entre nidada y nidada.
Aunque no lo hemos mencionado directamente, está claro que para no complicar las cosas debemos asegurar la "paternidad" de los pichones; por eso los criaderos tienen barrotes, para dejar encerradas a las parejas hasta la puesta de los huevos. También podríamos poner cada macho en un palomar separado... Sólo tenemos que elegir la alternativa que más satisfaga.
El método descrito es de una sencillez pasmosa y sus ventajas son muy evidentes: se sustituyen las tradicionales hembras reproductoras viajeras, cautivas, e inadaptadas, por otras jóvenes, aquerenciadas, e integradas. Se evita que el cultivo varíe mucho a la vez que se prescinde de la consanguinidad. Se les saca un mayor rendimiento a las buenas palomas (a los buenos machos en este caso). Nos ahorramos espacio, tiempo y dinero, al no tener hembras reproductoras fijas; etc.
Como es un método poco conocido puede parecer nuevo, pero no lo és. Sabemos que hace tiempo (antes de la segunda Gran Guerra) ya lo practicaban, a su modo, unos de los colombófilos más prestigiosos que hayan existido: Maurice Delbar (de Renaix, en Bélgica). He aquí algunos datos que lo prueban.
"... en el año 1.928, Maurice Delbar apareó un macho de 1,926 con una hembra adquirida de Portois, obteniendo un macho de 1.928 que luego acopló con una hembra adquirida de Preter produciendo en esta ocasión un macho de 1.931, que a su vez apareó con una hembra adquirida de Outrive para sacar de este cruce un macho de 1.938, el cual más tarde aparearía a una hembra adquirida de Devrient, para dejar en la reproducción un macho de 1.945..."
Podemos observar que Delbar en vez de machos utilizaba hembras (quizás porque en Bélgica, donde predomina el juego de los machos, es más fácil adquirir buenas hembras que buenos machos), pero el método es el mismo y está ahí para quien quiera copiarlo.

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