Gusano Plano

Gusanos planos o tenias de palomas

En el presente artículo discutiremos un problema frecuentísimo en nuestras aves, las enfermedades producidas por los llamados vulgarmente {gusano planos} o tenias del palomo, que, si bien no resultan un peligro grave para su vida, si que ocasionan pérdidas económicas referidas al mal aprovechamiento de los piensos y, como no, a una patente disminución en sus rendimientos deportivos y reproductivos.

Considero importante aclarar en esta introducción un error generalizado entre los criadores de palomas con respecto al encuadramiento de estos seres vivos en la cadena zoológica. Esta equivocación radica en la consideración bajo un mismo concepto de los gusanos planos (Plathelmintos), protagonistas de este artículo, y los gusanos redondos (Nematodos), que lleva a los colombófilos a pesar que al haber tratado a sus animales con una antihelmíntico de amplio espectro (Piperacina, Levamisol, etc...) han eliminado todos los gusanos, cosa lejana a la realidad, pues una tenia, por, sus características etológica y morfológicas, exige un tratamiento distinto del usado contra los Nematodos, por desgracia más dificultosos y con frecuencia menos efectivos.

II. ¿TIOLOGIA?

Las tenias que afectan a la paloma pertenecen a los géneros siguientes:

Hymenolepis, Davainea (1,5-4 mm.), Contugnia y Aporina. Siendo más conocidas por nosotros las del primer género por suponer una infestación enzoótica en nuestra zona (Andalucía occidental tanto en palomas silvestres como en domésticas.

Son unos gusanos planos constituidos por la unión de segmentos (anillos o proglotis), el primero de los cuales se diferencia para la fijación en la mucosa entérica, estando muy armado con coronas de ganchos que le sirven para tal fin, a este anillo le siguen una serie de delgado (cuello) que se continúan con otros de mayor dimensiones hacia la cola (estróbilo). Cada uno de estos anillos están dotados con órganos sexuales masculinos y femeninos (hermafrodita), aunque sólo los últimos los poseen lo suficientemente maduros para su reproducción, éstos una vez fecundados tras la cópula con otras tenias, por plegamiento sobre sí misma (autofecundación), o por la fecundación dentro del mismo anillo, se desprenden saliendo al exterior junto con las haces como elementos diseminadores del parásito:

Son seres totalmente adaptados a la vida parásita, lo que demuestra la ausencias en su anatomía éstas que realiza cada anillo de manera aislada a través de la membrana que lo reviste.

III. EPIDEMIOLOGIA

Este aparato será contemplado de una manera general para todos los géneros citados por la gran similitud que presentan entre ellos.

El ciclo comienza con los parásitos adultos alojados en el intestino de las palomas afectadas. Por el mecanismo explicado en la Etiologia liberan los anillos repletos de huevos al exterior, y una vez en el medio comienzan unos movimientos diseminadores de su contenido. Los huevos son ingeridos por moscas, hormigas, escarabajos de los cereales, caracoles, etc... dependiendo del género de tenia que se trate.

Los huevos podríamos decir que son incubados en el cuerpo de estos animales formándose al cabo de tres semanas una larva (tipo cristicercoide).

A partir de este momento sólo esperan ser ingeridos por el ave junto con el animal portador (escarabajo, mosca, etc..).

Tras la ingestión y digestión del portador se libera la larva del huevo clavándose más tarde entre dos vellosidades intestinales.

A partir de esta larva, ya clavada en el intestino, comienza a producirse por propensos de gemación anillos sucesivos en número y dimensiones variables dependiendo de la especie.

De esta manera toma la estructura explicada para el adulto en seis semanas, permaneciendo éste por largo tiempo en la paloma, generalmente 1,5-3 años, pudiendo permanecer unidas hasta la muerte del ave

La cantidad de tenias que parasitaria a cada individuo depende de la infestación de los animales de la zona y de las posibilidades de encuentro de la paloma con el hospedador intermediario (mosca, hormiga, etc..) viéndose esto último afectado por la época del año, condiciones meteorológicas y por los cuidados higiénicos del palomar

También es digna de tener en cuenta la mayor receptibilidad de los pichones, así como su mayor sensibilidad, pudiéndoles ocasionar las tenias un retraso irreparable en el crecimiento e incluso la muerte.

IV.PATOGENIA:

Este aspecto está acondicionado por la edad del hospedador definitivo, especie de parásito y número de ellos, etc.

La acción patógena la lleva a cabo mediante las lesiones producidas por su primer anillo (escólex) al clavarse en la mucosa intestinal, ocasionando inflamación en la misma que disminuyen la capacidad de absorción de nutrientes y aumenta la mortalidad y las secreciones (diarreas).

Otra acción importante es la expoliadora, ya que roba nutrientes a la paloma obligándola a comer para ella y para el parásito, ocasionando, así, las pérdidas por el mal aprovechamiento de los piensos a que aludimos en la introducción.

V. SÍNTOMAS:

En el caso de infectaciones reducidas no aparece síntomas alguno evidente, solamente demostrable el ya mencionado descenso en el aprovechamiento de los piensos: los animales comen mucho y rinden poco. Otro síntoma evidenciable es la disminución de defensas contra enfermedades, notándose en una mala respuesta a las vacunas, haciendo que aparezcan enfermos entre animales vacunados (viruela, new.castle, paratifus,etc.

Cuando las infectaciones son masivas además de aparecer estos síntomas más agudizados, se aprecia un adelgazamiento lento y progresivo, unido a alteraciones en la defecación, alternándose periodos de diarrea, que pueden ser hemorrágico con otros de estreñimiento.

Mucho más peligrosa resulta esta enfermedad en los animales jóvenes, ya que además de su mayor sensibilidad, que los pueden llevar a la muerte, aparecen retrasos en el crecimiento que se hacen irreversible inutilizando a los pichones afectados para nuestro deporte.

VI.DIAGNOSTICO:

Cuando un colombófilo se encuentra ante animales que presentan una sintomatología igual o similar a la descrita, debe observar detenidamente las heces de sus aves intentando localizar los anillos de los parásitos (descritos con anterioridad). No obstante, ésto no siempre se detectan de esta forma, pues en las tenias de pequeño tamaño son imperceptibles a simple vista.

De cualquier modo, aconsejamos al criador de palomas que ante un caso de este tipo recoja haces fresca, las introduzca en un pequeño bote de vidrio bien limpio, le coloque en la superficie un algodón humedecido con agua, lo cierre herméticamente y lo envíe por correo lo más urgente posible a un laboratorio especializado en Parasitología y enfermedades parasitarias para que realicen allí un diagnóstico eficaz.

Los animales muertos deben ser investigados profundamente, para ello se les extraen las vísceras de la cavidad abdominal, se aísla el intestino delgado, se abre este longitudinalmente y se intentan visualizar en su interior los parásitos adultos, a simple vista en aquellos de gran tamaño y ayudándose con una lupa para los pequeños, observando en este último caso con especial detenimiento, pues algunos de ellos se clavan profundamente en la mucosa (Davainea) dejando hacia la luz del intestino sólo su último anillo.

VII. TRATAMIENTO:

Con fines curativos se pueden emplear varios fármacos, de entre ellos resaltan dos como los más eficaces. En primer lugar el Yomensan (Bayer) cuyo principio activo, la Niclosamida, es muy eficaz para las tenias de las aves en general, y en especial ante los géneros Raillietina y Davainea.

Los inconvenientes que presenta este fármaco son, en primer lugar, la exigencias de ayuno de los animales previa a la administración y en segundo, su difícil dosificación, ya que el Yomesan se presenta en comprimidos de 125 mgr. provisto con dos ranuras para su partición en cuatro cuartos, teniendo que suministrarles a cada paloma un sexto de un cuarto (50 mgr. de Niclosamida).

Su mayor ventaja es la eficacia, además es activo a una sola dosis y se administra vía oral.

Otro fármaco interesante es el Fugo-tenil (Uriach) usado para combatir las tenias de las gallinas y cuyo resultados en palomas estamos estudiando en dos brotes presentados en Córdoba. Si su actividad lo hiciera aconsejable, constituiría sin duda el fármaco de elección, pues para su administración es necesario ayuno y se dosifica con gran simpleza, administrando a cada animal un cuarto de comprimido (125-150 mgr. de principio activo), pudiendo doblarse la dosis si se estima oportuno (medio comprimido, 250 mgr. de p.a.).

VIII. PREVENCIÓN:

La profilaxis se centra principalmente en la lucha contra el hospedador intermediario (hormiga, escarabajo, mosca, etc.). Para ello es necesario mantener el palomar limpio, ya que estos portadores son generalmente coprófilos (son atraídos por las heces), usando al mismo tiempo un insecticida potente periódicamente, e incluso repelentes, incluso repelentes, reforzando su aplicación en los posibles lugares de penetración de estos animales al palomar. También es importante vigilar que los granos estén libres de insectos, si no fuera así, cambiaríamos de de suministrador del grano automáticamente.

Por otro lado es muy importante descubrir la presencia de tenias por mínima que sea su incidencia, por ello aconsejamos unos estudios periódicos de las heces (al menos dos veces al año) con fines a orientar nuestra lucha directa contra los gusanos planos.

IX. CONCLUSIONES:

Se nos hace evidente la enorme incidencia que las tenias de las palomas poseen en todo nuestro país, incrementándose, sin duda, en Canarias por múltiples razones entre las que se encuentran: su clima siempre óptimo para la vida de los hospedadores intermediarios, las grandes importaciones de granos del exterior que traen consigo hospedadores cargados de larvas de tenias, la gran densidad de palomas, que facilita el contagio, y sobre todo, por la nula preocupación de los criadores ante este problema.

Queremos que los lectores tengan presente tras la lectura de este artículo, que, a pesar de no resultar un peligro para la vida de nuestras aves, en la mayoría de los casos las tenias producen unas pérdidas incalculables, fundamentalmente por bajada de los rendimientos tanto deportivos (pérdidas o malas marcas), como reproductivos (muertes o mal desarrollo de los pichones), sin olvidar el mayor consumo de pienso que implica la existencia de estos parásitos en el intestino las palomas.