14/8/11

Estirpe

                                                          Estirpe
   Se denomina estirpe al conjunto de individuos procedentes de una misma familia, los cuales han conseguido caracteres comunes. En nuestro deporte, las estirpes son tan numerosas como variadas, aunque sus caracteres suelen sufrir variaciones frecuentes.
   En la formación de la estirpe influyen muchos factores, los cuales iremos comentando.
   Un factor primordial es el medio ambiente donde vive la paloma, pues todo animal sufre unas modificaciones para adaptarse a las diferentes; temperaturas, humedad, aire, alimentación etc. De ahí los diferentes tipos de palomas.
   Otro factor es la selección, en la cual escogemos los reproductores con el fin de perfeccionar la especie, debiendo realizarse razonadamente y con un conocimiento la más científico posible. 
   El tercer factor que compone la estirpe es el apareamiento, en el cual debe conocerse las reglas de la herencia y un ideal razonado para así poder conseguir buenos resultados.
   El cuarto factor es el relación con el anterior, pues se realiza cuando se aparean palomas parientes próximos, denominándose consanguinidad intensa cuando la unión es padre e hija o nieta, madre con hijo o nieto; y consanguinidad superficial formada por la unión tío con sobrina, primo y prima, tías y sobrino.
   Lo peculiar de la consanguinidad es fijar aumentando los caracteres creados en una estirpe o raza.
   En colombofilia hay cierto número de practicantes que son partidarios de la consanguinidad y otros son adversos e implacables de este método. No me inclino por ninguno, pero las experiencias han demostrado suficientemente que la consanguinidad es el medio que ha conseguido el perfeccionamiento en ejemplares secados de una misma familia.
   En nuestro deporte, el más cierto y primordial para crear una estirpe o raza, es por la consanguinidad. Siempre que se haga de manera razonada y teniendo en cuenta los factores mencionados anteriormente más otro que no había mencionado, que es el entrenamiento, pues el ejercicio perfeccionado la idoneidad para el vuelo y el instinto de la orientación, estas aptitudes conseguidas con el ejercicio, luego son transmitidas a sus descendientes.

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