Los equipos formados por perros de salvamento ayudan a salvar vidas en casos como terremotos, corrimientos de tierras, explosiones, accidentes de minas, etcétera, en cualquier parte del planeta.
Los perros de salvamento deben buscar a personas desaparecidas y/o sepultadas bajo los escombros. Tarea realizada bajo condiciones de trabajo de extrema dureza.
Una vez que el animal ha encontrado algún hallago, ya sea una persona viva o muerta, realiza una serie de ladridos o cualquier otro comportamiento aprendido para que las personas del equipo de salvamento sepan que el perro ha localizado algo.
El Boxer es un animal muy adecuado para este tipo de tareas, tal como ha quedado demostrado en multitud de operaciones de salvamento en donde se ha utilizado este tipo de perros adiestrados para el salvamento.
Uno de los requisitos indispensables para la formación de estos animales es el dominio total de la subordinación y del rastreo. El adiestramiento de los perros de salvamento consiste, básicamente, en la habituación de los animales a cualquier tipo de acontecimiento y a la presencia de agentes externos no habituales como fuego, humo ruido, agua, etcétera.
Los perros deben estar acostumbrados a descender en una especie de jaula desde un helicóptero y saber trabajar sin luz natural en minas derrumbadas. Igualmente, este tipo de canes debe saber rastrear terrenos cubiertos de escombros y deben saber encontrar a posibles personas que se encuentren allí enterradas.
El trabajo de estos perros es una labor divertida y gratificante para ellos. Este tipo de perros se divierten y <<juega>> buscando algo y siendo premiado por ello, siempre que tengan éxito. Únicamente los perros sin problemas nerviosos ni de carácter, que sean fuertes y resistentes, y con una estrecha relación de confianza con el adiestramiento puede realizar esta clase de trabajos.
En ningún caso. estos preciados perros reaccionan con agresividad con las personas halladas y que se encuentran presas del pánico y del miedo. Normalemente, la persona hallada se suele mostrar nerviosa cuando ve a un perro grande y enorme.
Igualmente, estos canes son también tolerantes con el resto de perros de salvamento que conforman el grupo. De hecho, son varios los animales que trabajan a la vez y simultáneamente en un único fin: salvar el mayor número de vidas posibles de una catátrofe.
Cuando el animal trabaja en un terreno de escombros y derrumbamiento, el conductor no puede acompañar al animal, que trabaja sin collar ni correa. La labor del perro, en esas circustancias, depende únicamente y exclusivamente de él.
Cuando, por fin, el perro señala una posible víctima es cuando el ayudante identifica la posición del can y se determina una avanzadilla de salvamento humano para rescatar a la vítima.
Para los rescates es imprescidible una compenetración total entre el Boxer y su amo.
Los perros de salvamento deben buscar a personas desaparecidas y/o sepultadas bajo los escombros. Tarea realizada bajo condiciones de trabajo de extrema dureza.
Una vez que el animal ha encontrado algún hallago, ya sea una persona viva o muerta, realiza una serie de ladridos o cualquier otro comportamiento aprendido para que las personas del equipo de salvamento sepan que el perro ha localizado algo.
El Boxer es un animal muy adecuado para este tipo de tareas, tal como ha quedado demostrado en multitud de operaciones de salvamento en donde se ha utilizado este tipo de perros adiestrados para el salvamento.
Uno de los requisitos indispensables para la formación de estos animales es el dominio total de la subordinación y del rastreo. El adiestramiento de los perros de salvamento consiste, básicamente, en la habituación de los animales a cualquier tipo de acontecimiento y a la presencia de agentes externos no habituales como fuego, humo ruido, agua, etcétera.
Los perros deben estar acostumbrados a descender en una especie de jaula desde un helicóptero y saber trabajar sin luz natural en minas derrumbadas. Igualmente, este tipo de canes debe saber rastrear terrenos cubiertos de escombros y deben saber encontrar a posibles personas que se encuentren allí enterradas.
El trabajo de estos perros es una labor divertida y gratificante para ellos. Este tipo de perros se divierten y <<juega>> buscando algo y siendo premiado por ello, siempre que tengan éxito. Únicamente los perros sin problemas nerviosos ni de carácter, que sean fuertes y resistentes, y con una estrecha relación de confianza con el adiestramiento puede realizar esta clase de trabajos.
En ningún caso. estos preciados perros reaccionan con agresividad con las personas halladas y que se encuentran presas del pánico y del miedo. Normalemente, la persona hallada se suele mostrar nerviosa cuando ve a un perro grande y enorme.
Igualmente, estos canes son también tolerantes con el resto de perros de salvamento que conforman el grupo. De hecho, son varios los animales que trabajan a la vez y simultáneamente en un único fin: salvar el mayor número de vidas posibles de una catátrofe.
Cuando el animal trabaja en un terreno de escombros y derrumbamiento, el conductor no puede acompañar al animal, que trabaja sin collar ni correa. La labor del perro, en esas circustancias, depende únicamente y exclusivamente de él.
Cuando, por fin, el perro señala una posible víctima es cuando el ayudante identifica la posición del can y se determina una avanzadilla de salvamento humano para rescatar a la vítima.
Para los rescates es imprescidible una compenetración total entre el Boxer y su amo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario