Coloración
La coloración que distingue al loro gris es resultado de una carencia parcial de uno de los dos grupos principales de pigmentos en su plumaje. La mayoría de los psitacismos cuentan con dos tipos diferentes de pigmentos: carotenoides y melanina. Los carotenoides son responsables de la amplia gama que discurre desde el amarillo pálido hasta el rojo intenso mientras que las melaninas es un pigmento oscuro que se halla asociado con el plumaje castaño, gris y negro.
Estas dos clases de pigmentos se encuentran situadas a diferente nivel dentro de las barbas de la pluma. El grupo carotenoides se encuentra en la parte externa, conocida como córtex, mientras que la melanina se halla confinada a la médula interna. Como elemento de separación entre ambos figura la conocida como capa esponjosa, en la que no existe pigmento alguno, pero que da lugar que la luz que pasa a su través pueda ser reflejada y dar con ello origen a una coloración azul en ausencia de pigmentos carotenoides en la parte superior. En el caso del loro gris, los pigmentos carotenoides resultan notablemente ausentes del plumaje corporal, salvo en la cola, lo cual, en circunstancias normales, daría origen a un pájaro de color azul pero debe tenerse en cuenta que la capa esponjosa se halla altamente reducida en cuanto a tamaño y no puede reflejar la luz azul debido a tal circunstancia. El efecto resultante, por consiguiente, es la creación de plumas gris.
La intensidad de esta tonalidad varía, sin embargo, dentro del área de difusión del loro gris y así tenemos que los ejemplares de la parte occidental son, en general, más oscuros que los de regiones más meridionales, circunstancia ésta que se traduce en que los del Camerún y del Congo sean, por lo común, los de colores más claro y también los de mayor tamaño. Son de gris muy pálido y, con frecuencia, se ofrecen bajo el nombre de "plateados".
Aun cuando habitualmente no resulte posible determinar con certeza el sexo de los loros grises a través de una observación visual, a menudo es posible hacerlo en el caso de estos ejemplares de tonalidad más clara siempre partiendo del supuesto de que provienen de una misma área. Ello se debe a que una de las características sexuales de los machos maduros es que cuentan con una mayor deposición de melanina en el plumaje en comparación con las hembras. Este hecho, que tiende a no resultar obvio en el caso de los loros grises de coloración más oscura, con frecuencia aparece en grado muy evidente en los llamados "plateados"
Centremos por tanto nuestra atención en las alas en particular cuando vayamos en busca de una pareja de cría de estos grises y decidámonos primero por los que las tengan más oscuras, ya que invariablemente se tratará de machos, mientras que los ejemplares que las muestren de tonalidad más pálida es probable que sean hembras. Esta distinción, sin embargo, sólo resulta evidente después de que se haya producido la muda y se haya desarrollado el plumaje de pájaros adultos ya que siempre existe lo posibilidad de que los ejemplares de tonalidad más pálida sean machos inmaduros en lugar de hembras. De todos modos, la confirmación del sexo puede conseguirse por otros medios que serán objeto de consideración más adelante.
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